RESUMEN: Para alcanzar nuestras metas y triunfar necesitamos ser eficientes, creativos, innovadores, originales, hábiles para tomar decisiones y solucionar problemas. Especialmente, necesitamos tener niveles muy altos de energía. Este tipo de recursos no los ofrece el trabajo duro e incansable, sino todo lo contrario: el darnos una pausa, bajar el ritmo, estar quietos y en silencio, descansar y dormir.
El cansancio no es un signo de trabajo duro, es un signo de que debes escuchar tu cuerpo y tu mente y darles lo que necesitan para que funcionen bien. Si quieres ser el artífice de tu propio éxito, gestiona tu nivel de energía. Si quieres ser empresario de ti mismo, administra el tiempo de tal manera que no se reduzca únicamente al frenesí del trabajo y el esfuerzo. Si quieres dar más, descansa más.
Como ya lo he señalado previamente en el blog, el trabajo duro no es el único medio necesario para alcanzar nuestros más preciados logros. Se necesita de un trabajo constante pero también de un trabajo inteligente.
Trabajar sin descanso sin duda alguna NO es trabajar de manera inteligente.
"Permanecer en reposo es una forma de enamorarse del mundo". Pico Iyer.
La personalidad de las personas incapaces de descansar
Actualmente contamos con una categoría para diferenciar el tipo de personalidad que es más exitosa, que resulta ser una personalidad que no descansa. Las personas tipo A: personas inquietas, apresuradas, impacientes, competitivas, agresivas, hostiles, dominantes, autoritarias, constantemente alertas y estresadas, ambiciosas. Incapaces de relajarse, trabajar menos horas, realizar una única tarea a la vez o tomar unas vacaciones.
La personalidad del tipo A come rápido, camina rápido, escribe, habla y lee rápido. Tiene un horrible sentido de la urgencia del tiempo y se siente culpable cuando se relaja, no distingue lo urgente de lo importante e invierte una cantidad desproporcionada de su energía física y emocional luchando contra el tiempo y sus limitaciones. Para una persona así, aburrirse o tener que esperar algo es un tormento irresistible.
Una persona de este tipo siempre está atormentándose con cuestiones como:
"Tengo mucho por hacer y no me alcanza el tiempo", "¿Cómo puedo moverme más rápido y hacer más y más cosas en menos tiempo?".
Si nos detenemos un poco para pensar, quienes se identifican con este tipo de personalidad (es importante aclarar que esta NO es una categoría psicológica comprobada) son personas con baja autoestima, inseguras, inconformes, ansiosas, irritables, impacientes y de mal humor. También padecen del efecto tetris: están tan obsesionadas con su trabajo que no paran de hablar y pensar en él y este aparece de manera recurrente en cualquier momento del día, ¡incluso en sus propios sueños!.
Las redes sociales y el contenido motivador te incitan a convertirte en una persona con estas características: nunca te detengas, trabaja constantemente -cada vez más rápido y con mayor esfuerzo- y abandona todo tipo de actividad que te quite tiempo para perseguir tus metas. Sin embargo, el éxito no es tan sencillo de obtener, ya que requiere de inteligencia y de estrategia, no sólo de esfuerzo.
Si esto fuera así, los obreros y constructores serían los más exitosos, pues trabajan de manera más ardua que la mayoría. Pero quienes son más exitosos se ganan la vida pensando, creando y desarrollando ideas, no únicamente trabajando duro. Inclusive, las personas que son promovidas y ascendidas en su trabajo no son necesariamente las que trabajan más, las que trabajan más horas extras y tratan de cumplir a tiempo con todo, sino las que se vuelven indispensables para coordinar a otras, o para que ciertas cosas funcionen bien dentro de una compañía.